Convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA)

Cómo convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA)

Si está interesado en una carrera como profesional financiero y aspira a trabajar como asesor de inversiones, ayudando a los inversores particulares a gestionar sus activos y proporcionándoles asesoramiento financiero, convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA) es un paso crucial. En esta completa guía, exploraremos las cualificaciones, los requisitos de licencia y los aspectos normativos para convertirse en un RIA.

Licencias y cualificaciones

El primer paso para comenzar a ser un Asesor de Inversiones Registrado (RIA) es que las personas aprueben el examen Series 65 (Ley Uniforme de Asesores de Inversiones), que los califica para convertirse en Representantes de Asesores de Inversiones (IAR). El examen Series 65 abarca las leyes federales sobre valores y otros temas relacionados con el asesoramiento de inversiones. Consta de 130 preguntas de opción múltiple puntuadas, y los candidatos deben responder correctamente a 94 preguntas para aprobar el examen de tres horas.
Aunque aprobar el examen Series 65 es el principal requisito para convertirse en IAR, otras cualificaciones y designaciones pueden mejorar la credibilidad y las perspectivas de negocio de un asesor. Los asesores pueden considerar la posibilidad de realizar otros exámenes FINRA, como el Series 6 o el Series 7, así como credenciales profesionales como la designación Certified Financial Planner® (CFP®) o Chartered Financial Analyst (CFA). Algunos estados incluso permiten que los asesores con designaciones específicas en regla no tengan que realizar el examen Series 65.

Registro federal y estatal de los RIA

Tras obtener las licencias y cualificaciones necesarias como IAR, el siguiente paso para convertirse en un RIA es registrar la empresa de asesoramiento financiero en la Comisión del Mercado de Valores (SEC) o en el estado o estados en los que el asesor pretenda operar. Sin embargo, el registro no es necesario si la prestación de servicios de inversión o asesoramiento es puramente incidental a la práctica y el asesor entra dentro de categorías profesionales específicas como contables, abogados o ingenieros.
La posibilidad de registrarse en la SEC depende del importe de los activos gestionados (AUM) y de la ubicación de la oficina principal y el centro de actividad del asesor. Por lo general, los pequeños asesores con menos de 25 millones de dólares de AUM deben registrarse ante las autoridades estatales, mientras que los asesores medianos y grandes con umbrales de AUM superiores tienen la opción de registrarse ante la SEC. Es importante tener en cuenta que los requisitos de registro pueden variar en función de la normativa estatal específica.

Los RIA y el formulario ADV

Al solicitar convertirse en un RIA, los asesores deben presentar un Formulario ADV, que sirve como documento oficial de registro. El formulario ADV incluye información importante sobre la empresa de asesoramiento, sus servicios, honorarios, conflictos de intereses e historial disciplinario. Además, el formulario ADV exige que los asesores proporcionen a todos los clientes un documento de información, conocido como Parte 2 del formulario ADV. Este documento proporciona información detallada sobre los antecedentes, las cualificaciones y las prácticas empresariales del asesor.
Es crucial que los RIA mantengan información precisa y actualizada en su Formulario ADV, ya que cualquier cambio material debe ser notificado con prontitud a la SEC o a las autoridades estatales. El Formulario ADV es una herramienta vital para que los inversores y los reguladores evalúen la credibilidad y transparencia de un RIA.

Deber fiduciario y protección del cliente

Los Asesores de Inversión Registrados (RIA) tienen el deber fiduciario de actuar en todo momento en el mejor interés de sus clientes. Esto significa que los RIA están legalmente obligados a dar prioridad a los intereses de sus clientes por encima de los suyos propios y a revelar cualquier conflicto de intereses que pueda surgir. Esta norma fiduciaria diferencia a los RIA de otros tipos de asesores financieros y garantiza que los clientes reciban un asesoramiento de inversión imparcial y adecuado.
Los RIA son remunerados por sus servicios mediante un porcentaje de los activos que gestionan, normalmente denominados activos bajo gestión (AUM). Esta estructura de comisiones alinea los intereses del asesor con los del cliente, ya que la remuneración del asesor aumenta o disminuye en función del rendimiento de las inversiones del cliente.

Ventajas de trabajar con un RIA

Trabajar con un asesor de inversiones registrado (RIA) puede reportar varias ventajas a los inversores. He aquí algunas ventajas clave:
1. Obligación fiduciaria: Los RIA tienen la obligación legal de actuar en el mejor interés de sus clientes, asegurándose de que sus recomendaciones estén alineadas con los objetivos y la tolerancia al riesgo del cliente.
2. Asesoramiento personalizado: Los RIA suelen ofrecer asesoramiento de inversión personalizado adaptado a la situación financiera, objetivos y preferencias únicas de cada cliente.
3. Planificación financiera holística: Los RIA suelen ofrecer servicios integrales de planificación financiera que van más allá de la mera gestión de inversiones. Pueden ayudar con la planificación de la jubilación, estrategias fiscales, planificación patrimonial y otros aspectos de las finanzas personales.
4. 4. Transparencia: Los RIA están obligados a proporcionar información clara y transparente sobre sus honorarios, servicios y posibles conflictos de intereses, lo que permite a los clientes tomar decisiones informadas.

La lucha por la supervisión reglamentaria

A lo largo de los años, ha habido un debate continuo sobre la regulación de los asesores financieros y las normas que deben cumplir. El deber fiduciario de los asesores de inversión registrados (RIA) ha sido un punto central de este debate. Los defensores sostienen que todos los asesores financieros deben cumplir una norma fiduciaria, mientras que los detractores expresan su preocupación por el posible aumento de los costes y las cargas reglamentarias.
Se han hecho esfuerzos para ampliar el deber fiduciario a todos los profesionales financieros, independientemente de su situación registral. Sin embargo, por ahora, los RIA siguen siendo el único grupo de asesores que están legalmente obligados por el deber fiduciario de actuar en el mejor interés de sus clientes.

Preguntas frecuentes

1. 1. ¿Puede cualquiera convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA)?
No, no todo el mundo puede convertirse en RIA. Para convertirse en un RIA, las personas deben cumplir requisitos específicos de licencia y cualificación, incluida la superación del examen Series 65 o la obtención de designaciones equivalentes.
2. ¿Tienen que registrarse los RIA en la Securities and Exchange Commission (SEC)?
Los RIA deben registrarse en la SEC o en las autoridades estatales, dependiendo de la cantidad de activos que gestionen y de la ubicación de su oficina principal.
3. ¿Cómo se remunera a los RIA?
Los RIA suelen ser remunerados mediante un porcentaje de los activos que gestionan (activos bajo gestión o AUM). Esta estructura de comisiones alinea los intereses del asesor con los del cliente.

Lo esencial

Convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA) es un hito importante para las personas que desean ofrecer asesoramiento en materia de inversión y consejo financiero a inversores particulares. Cumpliendo los requisitos necesarios para obtener la licencia, inscribiéndose en el registro de las autoridades reguladoras pertinentes y respetando el deber fiduciario, los RIA pueden labrarse una carrera profesional centrada en servir a los intereses de sus clientes. Trabajar con un RIA puede proporcionar a los inversores un asesoramiento personalizado, una planificación financiera holística, transparencia y la garantía de una supervisión reglamentaria.
Descargo de responsabilidad: La información proporcionada en este artículo tiene únicamente fines educativos y no debe considerarse asesoramiento financiero o de inversión. Consulte a un asesor financiero o fiscal cualificado para obtener asesoramiento personalizado adaptado a su situación específica.
Referencias:
1. Investopedia – Cómo convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA)
2. Comisión del Mercado de Valores de EE.UU. – Formulario ADV
3. FINRA – Examen Serie 65
4. Consejo de Normas del Planificador Financiero Certificado
5. Instituto CFA

Preguntas y respuestas

¿Puede cualquiera convertirse en asesor de inversiones registrado (RIA)?

No, no todo el mundo puede convertirse en un RIA. Para convertirse en un RIA, las personas deben cumplir requisitos específicos de licencia y cualificación, incluida la superación del examen Series 65 o la obtención de designaciones equivalentes.

¿Tienen que registrarse los RIA en la Securities and Exchange Commission (SEC)?

Los RIA deben registrarse en la SEC o en las autoridades estatales, en función del volumen de activos que gestionen y de la ubicación de su oficina principal.

¿Cómo se remunera a los RIA?

Los RIA suelen ser remunerados mediante un porcentaje de los activos que gestionan (activos bajo gestión o AUM). Esta estructura de honorarios alinea los intereses del asesor con los del cliente.

¿Cuál es el deber fiduciario de los asesores de inversiones registrados (RIA)?

Los RIA tienen el deber fiduciario de actuar en el mejor interés de sus clientes. Esto significa anteponer los intereses del cliente a los suyos propios y revelar cualquier conflicto de intereses que pueda surgir.

¿Cuáles son las ventajas de trabajar con un RIA?

Trabajar con un RIA puede proporcionar varias ventajas, como asesoramiento personalizado, planificación financiera holística, transparencia y la garantía de una supervisión reglamentaria.

¿Pueden los RIA recomendar una amplia gama de inversiones?

Sí, los RIA tienen flexibilidad para recomendar una amplia gama de opciones de inversión, como acciones, bonos, fondos de inversión, fondos cotizados en bolsa (ETF) e inversiones alternativas, en función de los objetivos y la tolerancia al riesgo del cliente.

¿Cuáles son los debates actuales sobre la regulación de los asesores financieros?

Existe un debate permanente sobre la regulación de los asesores financieros y las normas que deben cumplir. Se han hecho esfuerzos para ampliar el deber fiduciario para abarcar a todos los profesionales financieros, pero actualmente, los RIA son el único grupo legalmente obligado por el deber fiduciario de actuar en el mejor interés de sus clientes.