Comprender los traunches: Dividir los pagos para gestionar el riesgo del inversor
Invertir en empresas de nueva creación puede ser una empresa arriesgada, y los inversores siempre buscan formas de mitigar sus riesgos. Un método que ha ganado popularidad en los círculos de capital riesgo es el uso de traunches. En este artículo, nos adentraremos en el concepto de las lanzaderas y exploraremos cómo pueden ayudar a gestionar los riesgos de los inversores.
¿Qué es un traunch?
Un “traunch” es un término utilizado para describir una serie de pagos efectuados a una empresa durante un periodo determinado. Estos pagos están sujetos a la consecución de determinados parámetros de rendimiento. La palabra “traunch” deriva de la palabra francesa “tranche”, que significa “trozo”. El concepto de “traunch” se utiliza habitualmente en las rondas de captación de capital riesgo para financiar empresas de nueva creación.
Cómo funcionan los traunches
Cuando un inversor decide invertir en una empresa emergente, puede optar por dividir su inversión en tramos separados. Supongamos que una empresa busca financiación por valor de 5 millones de dólares. En lugar de aportar toda la cantidad por adelantado, el inversor puede proponer dividirla en dos tramos: 2,5 millones de forma inmediata y los 2,5 millones restantes en una fecha futura, siempre que la empresa alcance determinados hitos de rendimiento.
Al dividir la inversión en tramos, los inversores pueden reducir su exposición al riesgo. Tienen flexibilidad para retener más financiación a menos que la empresa demuestre avances en la consecución de su plan de negocio. Estos indicadores de progreso pueden incluir hitos en el desarrollo de productos, objetivos de ingresos, metas adicionales de recaudación de fondos u otros objetivos predefinidos.
Retos para las nuevas empresas
Aunque las lanzaderas ofrecen ventajas de gestión del riesgo para los inversores, pueden plantear retos para las propias empresas de nueva creación. El acceso limitado al capital invertido puede obstaculizar la capacidad de una empresa emergente para atraer y retener al personal clave. Con sólo una parte de la financiación disponible, la contratación de los mejores talentos puede resultar más difícil. Además, la incertidumbre que rodea a la financiación futura puede dificultar la retención de empleados, ya que la seguridad laboral puede ser incierta más allá del traunch actual.
La estructura de traunch también puede crear un desajuste de incentivos entre inversores y empresarios. Los empresarios pueden tener la tentación de ocultar información sobre los retos empresariales a los inversores, por temor a que pueda poner en peligro el lanzamiento del siguiente traunch. Esta falta de transparencia puede impedir una comunicación eficaz y obstaculizar la resolución de problemas.
Además, los objetivos de rendimiento predefinidos asociados a cada traunch no siempre se ajustan a las necesidades y oportunidades cambiantes de la startup. Las startups deben equilibrar la consecución de los objetivos fijados con la adaptación de sus modelos de negocio para capitalizar las tendencias emergentes o mitigar riesgos imprevistos. En ocasiones, la estructura de traunch puede obligar a los emprendedores a dar prioridad a hitos menos críticos, lo que puede obstaculizar el crecimiento y la innovación generales.
Un ejemplo real
Consideremos un escenario hipotético para ilustrar cómo funcionan los traunches en la práctica. Imagínese que usted es el fundador de una empresa emergente que ha conseguido una inversión traunched. Los términos del acuerdo de financiación estipulan que su empresa recibirá un millón de dólares inmediatamente, seguido de dos millones de dólares en 12 meses y otros siete millones de dólares en 24 meses.
Para desbloquear cada traunch posterior, debe cumplir objetivos específicos en plazos predefinidos. Por ejemplo, en los próximos 12 meses, tiene que contratar puestos clave cruciales para el crecimiento de su empresa. A los 24 meses, debe generar al menos 500.000 dólares de ingresos. El incumplimiento de estos objetivos puede suponer la pérdida del siguiente tramo de financiación.
Aunque aceptas estas condiciones, prevés posibles dificultades en el futuro. La limitada disponibilidad de fondos puede disuadir a posibles contrataciones de comprometerse con su empresa durante un período prolongado. Además, conseguir los clientes y los acuerdos de asociación necesarios para alcanzar su objetivo de ingresos podría ser difícil debido a la incertidumbre financiera percibida en su nueva empresa.
Conclusión
Los “traunches” pueden ser una herramienta valiosa para gestionar los riesgos de los inversores en las inversiones en startups. Al dividir los pagos en varias etapas y vincularlos a métricas de rendimiento predefinidas, los traunches proporcionan a los inversores un mayor control sobre su despliegue de capital. Sin embargo, también plantean retos para las nuevas empresas, como una flexibilidad limitada, incentivos desalineados y posibles dificultades para adaptarse a la dinámica cambiante del mercado.
Los fundadores de startups y los inversores deben considerar cuidadosamente las implicaciones de las estructuras traunch y garantizar una comunicación abierta y la alineación de los objetivos a lo largo de todo el proceso de inversión. Cuando se utilizan eficazmente, las estructuras traunch pueden lograr un equilibrio entre la gestión del riesgo y el apoyo al crecimiento empresarial, fomentando una relación mutuamente beneficiosa entre inversores y startups en el dinámico mundo del capital riesgo.
Preguntas y respuestas
¿Qué es un traunch?
Un “traunch” es una serie de pagos efectuados a una empresa a lo largo de un periodo determinado, siempre que se alcancen ciertos parámetros de rendimiento. Se utiliza comúnmente en los círculos de capital riesgo para referirse a las rondas de recaudación de fondos utilizadas para financiar empresas de nueva creación.
¿Cómo ayudan las rondas a gestionar los riesgos de los inversores?
Los “traunches” permiten a los inversores dividir su inversión en etapas, lo que les proporciona un mayor control y reduce su exposición al riesgo. Al vincular la liberación de pagos posteriores a hitos de rendimiento específicos, los inversores pueden evaluar el progreso de la startup antes de comprometer fondos adicionales.
¿Cuáles son las ventajas de los tramos para los inversores?
El uso de traunches permite a los inversores mitigar los riesgos liberando fondos únicamente cuando la startup alcanza objetivos predeterminados. Este enfoque permite a los inversores evaluar el rendimiento de la empresa antes de comprometer más capital, lo que reduce la probabilidad de invertir en empresas de bajo rendimiento.
¿Qué retos plantean los traunches para las startups?
Las startups pueden enfrentarse a retos debido a un acceso limitado al capital, lo que puede dificultar su capacidad para atraer y retener talento. Además, es posible que los objetivos de rendimiento predefinidos asociados a los traunches no siempre se ajusten a las necesidades y oportunidades cambiantes de la startup, lo que podría impedir el crecimiento y la innovación.
¿Cómo pueden las nuevas empresas hacer frente a los retos que plantean los traunches?
Para abordar los retos, las empresas emergentes pueden centrarse en una comunicación eficaz con los inversores, proporcionando actualizaciones periódicas sobre los progresos y los retos. Es crucial que los empresarios mantengan la transparencia y discutan cualquier problema potencial que pueda afectar a la consecución de los hitos de rendimiento.
¿Qué ocurre si una startup no cumple los hitos de rendimiento?
Si una startup no cumple los hitos de rendimiento predefinidos, puede perder el derecho al siguiente tramo de financiación. Este resultado pone de relieve la importancia de la planificación estratégica, la ejecución y la comunicación para garantizar que la startup se mantiene en el buen camino y cumple los objetivos acordados.
¿Se utilizan los traunches únicamente en las inversiones de capital riesgo?
Aunque los traunches se utilizan habitualmente en las inversiones de capital riesgo, también pueden emplearse en otros contextos. Por ejemplo, los traunches se utilizan en la titulización, como en el caso de los valores respaldados por hipotecas, en los que los flujos de caja se dividen en segmentos en función de diferentes características de riesgo. El concepto de dividir los pagos en el tiempo puede aplicarse en varios escenarios de inversión.