El rebote de las acciones bancarias podría ser la mayor víctima de la Fed
La reciente dovishness de la Reserva Federal puede suponer un problema para el rebote de las acciones bancarias, convirtiéndolas potencialmente en las mayores víctimas de la política monetaria del banco central. Tras el anuncio del presidente de la Fed, Jerome Powell, de dejar los tipos de interés sin cambios y mantener esta postura hasta finales de año, las acciones bancarias experimentaron un importante desplome, borrando las ganancias que habían obtenido durante su reciente recuperación. Esta evolución suscita preocupación sobre la rentabilidad y las perspectivas de crecimiento de grandes bancos como JPMorgan Chase, Citigroup, Goldman Sachs, Morgan Stanley y Bank of America.
El impacto en la rentabilidad bancaria
La decisión de la Reserva Federal de mantener bajos los tipos de interés y una curva de rendimientos más plana tiene implicaciones negativas para la rentabilidad de los bancos. Unos tipos de interés más bajos y una curva de rendimientos más plana pueden comprimir los márgenes de interés neto de los bancos y reducir la rentabilidad de los nuevos préstamos. Esto se debe al hecho de que los bancos obtienen una parte significativa de sus ingresos del diferencial entre los tipos de interés que cobran por los préstamos y los tipos de interés que pagan por los depósitos.
Ante la perspectiva de un año de tipos bajos y una curva de rendimientos más plana, es probable que los bancos tengan dificultades para mantener su rentabilidad. Esto puede tener un impacto directo en el precio de sus acciones, ya que los inversores se preocupan por el futuro potencial de beneficios de estas instituciones financieras.
El rebote de las acciones bancarias en 2019
El año pasado, las acciones bancarias experimentaron un pésimo rendimiento, con el índice KBW Nasdaq Bank cayendo un 18%. Sin embargo, el comienzo de 2019 trajo esperanzas renovadas para el sector, ya que las acciones bancarias repuntaron y ganaron impulso. El índice ya había registrado una rentabilidad positiva del 13% en lo que va de año, lo que indica un posible cambio de tendencia para el sector bancario.
Perspectivas de los inversores
Antes de la decisión de la Reserva Federal, Goldman Sachs publicó un informe en el que destacaba la expectativa de que el sector financiero, incluidos los bancos, lideraría el crecimiento de los beneficios por acción (BPA) en 2019. El informe proyectaba un crecimiento de las ganancias del 8% para el sector financiero, en comparación con solo el 3% para el índice más amplio S&P 500.
Sin embargo, la reciente postura moderada de la Reserva Federal ha provocado un cambio en el sentimiento de los inversores. Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años cayeron a su nivel más bajo en más de un año tras el anuncio de la Reserva Federal, lo que refleja la preocupación por la ralentización del crecimiento económico. Un crecimiento económico más lento puede afectar negativamente a la demanda de préstamos y a la calidad del crédito, lo que puede repercutir aún más en la rentabilidad de los bancos.
A pesar de los retos a corto plazo, algunos analistas e inversores siguen siendo optimistas sobre las perspectivas a largo plazo del sector bancario. Sostienen que los bancos han reducido considerablemente el riesgo y están bien posicionados para capear las actuales condiciones económicas. Esta perspectiva sugiere que la reciente caída de las acciones bancarias puede presentar una oportunidad de compra para los inversores que tengan un horizonte de inversión a largo plazo.
Michael Bapis, director gerente de Vios Advisors en Rockefeller Capital Management, se mostró optimista sobre el sector bancario, afirmando: “Soy positivo sobre el espacio a largo plazo. Me sorprende mucho que haya tardado tanto, pero si adoptamos una perspectiva a largo plazo para nuestros clientes, me parece bien esperar 18 meses a que se recupere.”
Conclusión
La reciente actitud moderada de la Reserva Federal ha ensombrecido el repunte de las acciones bancarias, convirtiéndolas potencialmente en las mayores víctimas de las políticas del banco central. La decisión de mantener bajos los tipos de interés y una curva de rendimientos más plana puede repercutir negativamente en la rentabilidad de los bancos y suscitar inquietud entre los inversores. Sin embargo, algunos participantes en el mercado creen que, a pesar de los retos a corto plazo, el sector bancario tiene potencial para recuperarse y ofrecer valor a largo plazo. Al igual que con cualquier inversión, la investigación y el análisis exhaustivos son cruciales para los inversores que buscan navegar por las complejidades de la industria bancaria en el clima económico actual.
Preguntas y respuestas
¿Cómo afectó la decisión de la Reserva Federal a las acciones bancarias?
La decisión de la Reserva Federal de no modificar los tipos de interés y mantener una postura moderada provocó un desplome de las acciones bancarias, borrando las ganancias que habían obtenido durante su reciente repunte.
¿Por qué unos tipos de interés más bajos y una curva de rendimientos más plana perjudican la rentabilidad de los bancos?
Unos tipos de interés más bajos y una curva de rendimientos más plana reducen los márgenes netos de intereses de los bancos, lo que puede afectar a su rentabilidad. Los bancos obtienen ingresos del diferencial entre los tipos de interés que cobran por los préstamos y los tipos de interés que pagan por los depósitos. Cuando los tipos son bajos y la curva de rendimientos es plana, este diferencial se reduce, lo que afecta a su rentabilidad.
¿Cuáles eran las expectativas de crecimiento de los beneficios del sector financiero antes de la decisión de la Reserva Federal?
Goldman Sachs preveía que el sector financiero, incluidos los bancos, lideraría el crecimiento de los beneficios por acción (BPA) en 2019. Estimaron un crecimiento de las ganancias del 8% para el sector financiero, en comparación con el 3% para el índice más amplio S & P 500.
Cómo afectó la caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años a las acciones bancarias?
La caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años tras la postura moderada de la Reserva Federal reflejó la preocupación por la ralentización del crecimiento económico. Esto puede afectar negativamente a la demanda de préstamos y a la calidad del crédito, lo que a su vez puede repercutir en la rentabilidad de los bancos y en la confianza de los inversores en las acciones bancarias.
¿Cuáles son las perspectivas a largo plazo para el sector bancario?
A pesar de los retos a corto plazo, algunos analistas e inversores siguen siendo optimistas sobre las perspectivas a largo plazo del sector bancario. Sostienen que los bancos han reducido significativamente el riesgo y están bien posicionados para capear las actuales condiciones económicas, lo que podría suponer una oportunidad de compra para los inversores con una perspectiva a largo plazo.
¿Deberían los inversores considerar la compra de acciones bancarias tras la reciente caída?
La decisión de invertir en acciones bancarias debe basarse en los objetivos de inversión individuales, la tolerancia al riesgo y una investigación y análisis exhaustivos. Aunque algunos participantes en el mercado ven potencial para un repunte del sector bancario, es importante que los inversores evalúen detenidamente el clima económico actual y los fundamentales específicos de cada banco antes de tomar decisiones de inversión.
¿Cuánto tardará en recuperarse el sector bancario?
El calendario para una posible recuperación del sector bancario es incierto y puede variar en función de diversos factores. Algunos inversores y analistas creen que el sector bancario puede tardar en recuperarse y generar valor a largo plazo, posiblemente 18 meses o más. La paciencia y un horizonte de inversión a largo plazo son factores importantes que deben tenerse en cuenta a la hora de evaluar el posible momento de una recuperación.