La contabilidad por partida doble es un sistema contable en el que cada transacción se registra en dos cuentas: un cargo en una cuenta y un abono en otra. Por ejemplo, si una empresa solicita un préstamo de 5.000 $, se cargan 5.000 $ en la cuenta de efectivo (activo) y se abonan 5.000 $ en la cuenta de deuda pendiente (pasivo).