4 estrategias para limitar las distribuciones mínimas obligatorias (RMD)

4 estrategias para limitar las distribuciones mínimas obligatorias (RMD)

La planificación de la jubilación implica considerar detenidamente diversos factores, entre ellos las distribuciones mínimas obligatorias (RMD). Para los inversores que han cumplido 73 años y tienen un plan 401(k) tradicional o una cuenta de jubilación individual (IRA), las RMD son una parte obligatoria de su trayectoria financiera. Sin embargo, existen estrategias que pueden ayudar a limitar o incluso eliminar el impacto de los RMD. En este artículo, exploraremos cuatro estrategias eficaces para gestionar los RMD y reducir sus implicaciones fiscales.

Seguir trabajando

Una estrategia a tener en cuenta para reducir el impacto de los RMD es seguir trabajando más allá de los 73 años. Si tiene un plan 401(k) y sigue trabajando para una empresa en la que no posee el 5% o más del negocio, puede retrasar las distribuciones de su plan 401(k) hasta que se jubile. Esta exención sólo se aplica al plan 401(k) de su lugar de trabajo actual. Sin embargo, si tiene una cuenta IRA o un plan 401(k) de una empresa anterior, tendrá que seguir la norma RMD.
Retrasar las distribuciones puede ser beneficioso, ya que permite que sus ahorros para la jubilación sigan creciendo con impuestos diferidos, aumentando potencialmente sus ahorros para el futuro. Es importante tener en cuenta que no realizar la distribución requerida de su cuenta de jubilación puede dar lugar a sanciones, por lo que es crucial entender las normas y limitaciones.

Convertir a una cuenta IRA Roth

Otra estrategia eficaz para gestionar los RMD es considerar la posibilidad de convertir parte de sus ahorros en una cuenta Roth IRA. A diferencia de las IRA tradicionales o las Roth 401(k)s, las IRA Roth no requieren RMD. Si transfiere una parte de sus ahorros a una cuenta Roth IRA, puede evitar por completo la necesidad de realizar distribuciones.
Aunque la conversión a una cuenta IRA Roth puede ser ventajosa para los ahorradores ricos, es esencial tener en cuenta las implicaciones fiscales. Cuando convierta dinero antes de impuestos de una cuenta de jubilación a una cuenta Roth IRA, tendrá que pagar impuestos sobre los fondos convertidos. Esto puede suponer una factura fiscal importante. Se recomienda consultar con un asesor fiscal para explorar sus opciones y determinar el mejor enfoque en función de su situación financiera específica.

Limitar las distribuciones en el primer año

Los RMD pueden empujar a los jubilados a tramos impositivos más altos, lo que se traduce en mayores obligaciones fiscales. Para mitigar esta situación, una estrategia consiste en limitar las distribuciones durante el primer año de elegibilidad para el RMD. Los jubilados que cumplen 73 años tienen hasta el 1 de abril del siguiente año natural para realizar su primer reparto. Sin embargo, retrasar la primera distribución significa tener que hacer dos distribuciones en el año siguiente, lo que puede llevarle a un tramo impositivo más alto.
Es preferible efectuar la primera distribución en cuanto cumpla 73 años, a menos que prevea estar en un tramo impositivo mucho más bajo en el momento de la jubilación. De este modo, puede evitar la necesidad de realizar dos distribuciones el mismo año, lo que podría reducir la carga fiscal total.

Donar las distribuciones a una organización benéfica cualificada

Para las personas que prefieren tener un impacto positivo con sus RMD, una estrategia es donar las distribuciones a una organización benéfica cualificada. Esta opción está disponible para los titulares de cuentas IRA tradicionales, pero no se aplica a los planes 401(k).
En virtud de la norma de las distribuciones benéficas cualificadas (QCD), los particulares pueden donar sus RMD a una organización benéfica cualificada y beneficiarse potencialmente de ventajas fiscales. Para ello, la aportación debe ser igual o inferior a 100.000 dólares y transferirse directamente de la cuenta IRA a la organización benéfica. Utilizando esta estrategia, puede apoyar causas que le interesan y, al mismo tiempo, reducir potencialmente su renta imponible.

Lo esencial

Los RMD son una consideración importante para los inversores a la hora de planificar su jubilación. Aunque son obligatorias para las personas con 401(k)s o IRA tradicionales, existen estrategias para limitar su impacto. Si se continúa trabajando, se convierte a una cuenta IRA Roth, se limitan las distribuciones durante el primer año o se donan las distribuciones a una organización benéfica cualificada, las personas pueden reducir potencialmente sus obligaciones fiscales y gestionar sus ahorros para la jubilación de forma más eficaz.
Es fundamental consultar con un asesor financiero o fiscal para comprender las normas y limitaciones específicas asociadas a cada estrategia y determinar el mejor enfoque en función de sus circunstancias financieras particulares. Con una planificación y una consideración cuidadosas, puede gestionar los RMD y optimizar sus ahorros para la jubilación para disfrutar de un futuro seguro y satisfactorio.
Fuentes:
1. Investopedia – 4 estrategias para limitar las distribuciones mínimas obligatorias (RMD)

Preguntas y respuestas

¿Qué son las distribuciones mínimas obligatorias (RMD)?

Las RMD son la cantidad mínima de dinero que las personas con 401(k)s tradicionales o cuentas individuales de jubilación (IRA) deben retirar de sus cuentas de jubilación cada año una vez alcanzada cierta edad. Si no se realiza la distribución obligatoria, pueden imponerse sanciones.

¿A qué edad tengo que empezar a retirar dinero?

A partir de finales de 2022, las personas deben empezar a recibir los RMD a partir de los 73 años. Anteriormente, el umbral de edad era de 70½ años, pero se elevó a 72 tras la aprobación de la ley Setting Every Community Up for Retirement Enhancement (SECURE).

¿Puedo retrasar el pago de los RMD si sigo trabajando?

Sí, puede retrasar el pago de los RMD del plan 401(k) de su empresa actual si sigue trabajando para una empresa en la que no posee el 5% o más del negocio. Sin embargo, esta exención no se aplica a las cuentas IRA o 401(k)s de empresas anteriores.

¿Cómo puede ayudar la conversión a una cuenta IRA Roth a gestionar los RMD?

Convertir parte de su cuenta IRA tradicional o de sus ahorros para la jubilación antes de impuestos en una cuenta Roth IRA puede ayudarle a gestionar los RMD. Las cuentas Roth IRA no están sujetas a los requisitos de RMD, por lo que si transfiere fondos a una cuenta Roth IRA, puede evitar o minimizar las obligaciones de RMD.

¿Cuáles son las implicaciones fiscales de la conversión a una cuenta IRA Roth?

Al convertir dinero antes de impuestos de una cuenta de jubilación a una cuenta Roth IRA, tendrá que pagar impuestos sobre los fondos convertidos. Esto puede suponer una factura fiscal importante. Es importante tener en cuenta las posibles implicaciones fiscales y consultar con un asesor fiscal para determinar el mejor enfoque para su situación específica.

¿Es posible limitar las distribuciones en el primer año de elegibilidad para el RMD?

Sí, es posible limitar las distribuciones en el primer año de elegibilidad para el RMD. Los jubilados que cumplen 73 años tienen hasta el 1 de abril del año natural siguiente para efectuar su primera distribución. Sin embargo, retrasar la primera distribución significa tener que hacer dos distribuciones en el año siguiente, lo que puede llevarle a un tramo impositivo más alto. Efectuar el primer reparto en cuanto cumpla 73 años, a menos que prevea estar en un tramo impositivo significativamente inferior en el momento de la jubilación, puede ayudarle a gestionar su carga fiscal de manera más eficaz.

¿Puedo donar mis RMD a una organización benéfica?

Sí, las personas con cuentas IRA tradicionales tienen la opción de donar sus RMD a una organización benéfica cualificada. Esto se conoce como distribución benéfica cualificada (QCD). Para ello, la aportación debe ser igual o inferior a 100.000 dólares y transferirse directamente de la cuenta IRA a la organización benéfica. Utilizando esta estrategia, puede apoyar causas benéficas al tiempo que reduce potencialmente su renta imponible.